El melanoma metastásico es un tumor de mal pronóstico cuya media de supervivencia se sitúa entre los 8 y 18 meses. Aproximadamente el 40-60% de melanomas presentan la mutación V600E en el gen BRAF, una serina/treonina cinasa implicada en la proliferación celular. Esta mutación induce la activación constitutiva de la vía MAPK y la evasión de la apoptosis.

Estudios recientes han demostrado que el tratamiento con Vemurafenib, un inhibidor de BRAF mutado, reduce en un 74% el riesgo de progresión del tumor y en 63% el riesgo de muerte, de pacientes con melanoma metastásico con mutaciones de BRAF. La detección de la mutación de BRAF es, por tanto, una información esencial para la selección de pacientes candidatos a tratamiento con Vemurafenib

BIBLIOGRAFÍA:

• Chapman et al. N Engl J Med 2011

 7/2011/ Dra. Ruth Román